En el curso de Coachig que llevo actualmente, hablamos mucho de desarrollo de habilidades y competencias. Una habilidad es la capacidad de hacer algo con destreza sin mucho esfuerzo, una competencia es más el desempeño que tengo en mi vida cotidiana tanto en lo laboral como en lo personal con ciertas tareas.
Si partimos de la premisa "No puedes dar lo que no tienes" definitivamente, si quiero ser un buen Coach, debo comenzar por mi misma; potenciando mis habilidades y desarrollando mejores competencias.
Tengo cierta facilidad para trabajar con las manos, pero no mucha paciencia cuando "tengo" que seguir un prototipo, me gusta mucho dejarme llevar por la creatividad, pero entre prueba y error, demoro más tiempo, no soy eficiente y no aprendo por querer hacerlo "a mi manera".
En estas clases caí en la cuenta porqué siempre me gustó trabajar sola, pero "no existe hermitaño exitoso" así que decidí "seguir las normas" que Betsy, mi maestra de scrapbook me ponía, dejé de verlo como imposición y empecé a aprender de cada cosa que me explicaba.
Desarrollaba la escucha activa, cuando oía las instrucciones no para responder sino para comprender lo que quería enseñarme. Me armé de paciencia para alinear piezas pequeñas y comprendí que mis debilidades y tropiezos me permitían aprender a hacerlo mejor la próxima vez.
Trabajé la empatía con mi maestra al hacerla sentir como ella quisiera que la traten y me centré de lo buena y cariñosa que era (en realidad me quedé corta, es una persona increíble), practiqué trabajo en equipo pues por un tema de tiempo ella veía detalles de mi trabajo que yo por mi inexperiencia no vi y los solucionaba.
Trabajé la humildad, pues si bien me siento artista noté que en este rubro estaba "en pañales".
Si deseas desarrollar destrezas y habilidades que van a ayudarte a evolucionar como persona, un taller de este tipo es genial, completo, relajante y encima la satisfacción de llevarte el proyecto a casa es la cereza del helado.
¿Cual es tu habilidad?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario