Me gustaron algunos libros de Walter Risso y lo sigo en redes. Salió una frase con las palabras "Democracia emocional" y la curiosidad se encendió en mi cabeza (les dejo el pensamiento completo en la imagen de al lado).
Luego de buscar la palabra democracia y de ver varias definiciones, adaptándola a la pareja me quedé con: es la libre elección de dos personas de llevar una relación afectiva con responsabilidades de por medio, pero sin limitar el uno al otro.
Ahora bien, yo he sido criada de una manera, tengo creencias, pensamientos y sentimientos propios; la otra persona (pareja, mejor amig@, compañer@) viene con su mochila propia de emociones, pensamientos y etc.), por lo tanto el concepto de democracia afectiva varía de persona a persona.
Entonces, seguí investigando y llegué a la "Guía práctica para vencer la dependencia emocional" de Walter Risso y me pareció interesante tener claro primero qué es dependencia emocional, que vendría a ser una ayuda para buscar la democracia. ¿Cómo así? si en democracia hay libertad y en la dependencia no existe libertad, al evaluar si soy dependiente emocionalmente de alguien puedo trabajar en mí mismo, aprender a querer bien al resto y quererme mejor.
Mejor les comparto lo que pone Walter Risso en esta guía:
"
- Necesidad imperiosa de estar cerca de la persona amada o sentir amor la mayor parte del tiempo.
- Abstinencia manifiesta, si no se tienen las manifestaciones de afecto o la persona amada disponible. Es decir, desorganización conductual, malestar, ansiedad o simplemente desasosiego, similar a lo que ocurre con una persona adicta a cualquier droga química a la cual se le retira la misma.
- Incapacidad de controlar la compulsión de estar con la persona amada.
- Se emplea mucho tiempo mental y físico en mantenerse cerca de la pareja u obtener amor.
- Altos niveles de obsesión, preocupación y/o comportamientos vigilantes y controladores por miedo a perder la fuente del placer/seguridad (temor al abandono, a un engaño, o a la soledad).
- Reducción de actividades sociales, laborales o recreativas (reducción hedonista) para estar con la persona amada.
- Pese a tener claras las consecuencias negativas de amar sin límites (v. g. depresión, descontrol, ansiedad, baja autoestima, desorganización conductual, violencia intrafamiliar), se sigue manteniendo el estilo de vida dependiente. "
Entonces, según Walter Risso, si tenemos check en alguna de estas, habría que trabajar en ello pues si dependemos de alguien ya no seríamos libres y sin libertad no hay democracia.
¿Qué pienso yo? Que la democracia emocional siempre será un tira y afloja, partiendo de que solo yo puedo tener control en lo que hago y quiero, y habrán veces que la pareja no pueda o no quiera compartir lo que hago y quiero; lo único que si me queda claro, es que no debes dejar de hacer o vivir para encajar en la vida de alguien más si vas en contra de ti mismo y de igual forma, fluir con calma cuando la otra persona busca su propio bienestar, así esto incluya dar un paso al costado.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario