Hoy tuvimos una conversación ligeramente ajetreada y filosófica con mi hija y su Papá.
En clase de Zoom la profesora de un curso que habla sobre normas de convivencia, valores y moral, decía: los fines del matrimonio son dos: la vida en común y procrear vida (incluso lo dice la ley peruana, no solo la Biblia).
Mi hija está en un colegio católico donde los conceptos, en su mayoría son absolutos; por otro lado, hace algunos años; su papá y yo decidimos no llevar una vida de pareja y la separación legal depende de unos trámites complicados, así que somos como roomies, la casa es grande, dos plantas y se puede vivir independientemente (no es wow vivir a sí pero es lo que podemos por ahora).
Ella entendió que Papá y Mamá ya no son más pareja, pero que siguen siendo sus padres, que la aman y que darían la vida por ella, sin embargo, hoy preguntaba la profesora: ¿estaría bien que una pareja se case y no tenga hijos? o ¿estaría bien un divorcio? y ella decía: "no se puede ser tan cerrado, el matrimonio a veces ya no va, ambos sufren y no puede ser que nos cerremos en que sea para siempre" o decía: "hay personas que no quieren tener hijos pero se aman ¿cual es el problema?" .
Estoy muy orgullosa de que tenga su propia manera de pensar, siempre le enseñé que debía decir lo que pensaba y no hacerle el amén a todo lo que dijera el resto, si le parecían incorrectas las ideas; que si bien hay normas de convivencia, si sentía que estaba algo en contra de ella o de lo que pensaba: que lo exprese.
Pero... hoy llegó la dualidad, la profesora no preguntó ¿que opinan? sino ¿qué es lo correcto? (que también es relativo porque si no tengo un centavo no debo procrear o si me tratan como una mascota no debo seguir atado a alguien) y mi hija dijo: si me pregunta, le diré lo que pienso y me detuve un momento mientras barría el comedor. Traté de explicarle que hay ciertos lineamientos, que su opinión es válida, pero que si en un examen o la profesora pregunta, ella tiene que limitarse a responder lo que se pregunta y que si ella desea debatir, que lo puede hacer en otro momento, donde el diálogo sea abierto.
Ella respondió: "si yo no digo lo que pienso estoy siendo hipócrita" y me quedé pensando, su papá le explicaba que hay maneras de decir las cosas, que hay que evitar entrar en debate por temas de tiempos de clases virtuales, pero si ella quería, que organice un debate y lo exponga, pero que la clase no era el espacio.
Creo que cuando era chica era más "fácil"; aunque nos llenábamos de culpa por no pensar o estar de acuerdo con lo que decían los adultos a veces y había que "pelar las muelas" y seguir adelante. Criar adolescentes a veces se me hace difícil, sobre todo porque tengo dos, pero me da mucha satisfacción saber que van a pelear por sus ideales cuando ya no estén a mi lado, que será la mayor parte de sus vidas.💜
No hay comentarios.:
Publicar un comentario